10 de noviembre de 2014

UNA PIEDRA EN EL ZAPATO


Que caótico debe ser para nosotros, cuando queremos mostrar solo nuestros “aciertos” y esconder nuestros ”desaciertos”. Sobre todo cuando consideramos tener una “intrusa” en nuestra  Area  de Trabajo, porque como decíamos: “Hijos con todos ustedes he tenido que ver, menos con una persona que me la impuso RRHH”; ya que no estuve presente cuando la entrevistó el jefe de Planta Canadiense… ¿Porque tuvo que entrar ella, si antes se presentaron 19 hombres y no se les aceptó?… ¿Será por su ascendencia Judío-Alemana, originada por el racismo y preferencia por la raza extranjera del Canadiense?...
Entonces ordenamos declararle la “guerra” a ella, para evitar que RRHH. nos sorprenda con “los pantalones abajo” en las reuniones de Gerencia, porque seguro que ella informa sobre los “desaciertos” (sin saber que eran los “amarillos”, los informantes).
A lo que yo formulo la siguiente pregunta: ¿No será que la “cabeza” de RRHH. era más astuto y con mejores reflejos?. Concluyendo finalmente: ¿Puede desarrollarse una persona en un ambiente tan hostil?...

“La formación de grupos se da por compatibilidad de caracteres, ideologías, etc… No por “franeleo” o “servilismo”.

 






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